Al declarar instalados los trabajos de la Comisión para la Igualdad de Género, la senadora Martha Lucía Micher Camarena lamentó que, a pesar de los avances en la atención de la agenda feminista, aún persistan prácticas de violencia y discriminación contra las mujeres. Micher enfatizó que, aunque se han logrado derribar algunos techos de cristal y cuestionar la ideología patriarcal, es momento de que la legislación evolucione en materia de género; de lo contrario, se tardarían 200 años en alcanzar la igualdad.

En la instalación de la Comisión estuvo presente la titular de la Secretaría de las Mujeres, Citlalli Hernández Mora, quien se comprometió a fomentar el diálogo, avanzar en la igualdad y construir una agenda común en favor de las mujeres, desde su dependencia que comenzará a operar en enero.
La senadora de Morena, Araceli Saucedo Reyes, destacó que, con la llegada de una mujer a la presidencia de la República, el compromiso de las integrantes de esta Comisión deberá ser de resultados concretos para abordar las demandas de la sociedad. Añadió que estará atenta para analizar las reformas que la presidenta Claudia Sheinbaum enviará al Congreso.
Por su parte, Laura Esquivel Torres, del PAN, afirmó que cada logro de la Comisión será un paso hacia la garantía de los derechos de todos, pero enfatizó que los tomadores de decisiones deben trabajar de manera conjunta para saldar la deuda histórica con las mujeres.
Desde el PRI, Mely Romero Celis propuso incluir en el programa de trabajo de la Comisión propuestas de financiamiento y empoderamiento para mujeres, especialmente en zonas rurales, así como garantizarles la posesión de tierras, acceso a espacios de toma de decisiones y el fortalecimiento de programas de educación media superior y superior.
Luis Donaldo Colosio Riojas, de Movimiento Ciudadano, expresó que en esta nueva etapa los hombres deben cambiar su mentalidad para transformar la vida de las mujeres y brindarles una legislación más justa.
Finalmente, Virginia Marie Magaña Fonseca, del PVEM, destacó que, a pesar de que por primera vez en su historia México tenga una mujer presidenta, las mujeres siguen enfrentando discriminación, violencia y falta de espacios en el poder, lo que subraya la necesidad de seguir trabajando para erradicar la desigualdad.