En su intervención durante la toma de protesta de Claudia Sheinbaum como la primera presidenta de México, la senadora Guadalupe Murguía Gutiérrez, coordinadora de las y los senadores del PAN, enfatizó que México no necesita una presidenta tutelada. La senadora por Querétaro instó a Sheinbaum a hacer valer su autonomía, destacando que en nuestro país ya no hay lugar para caudillos ni maximatos.
Murguía Gutiérrez expresó su confianza en que la presidencia de Sheinbaum marcará un hito para las mujeres mexicanas, abriendo mejores tiempos y mayores oportunidades. Además, hizo un llamado a respetar los contrapesos y las libertades que son esenciales para la democracia.
“La fuerza del voto se expresó en las urnas y nos ha enseñado una vez más que en democracia nadie gana todo y tampoco nadie pierde para siempre”, afirmó desde la tribuna parlamentaria de San Lázaro. Señaló que Sheinbaum enfrenta los retos de poner orden en el país y lograr la reconciliación nacional, tras lo que consideró una de las épocas más oscuras de la administración saliente.
Murguía criticó la política de abrazos no balazos, afirmando que esta estrategia ha llevado a más violencia e impunidad, con el Estado fallando en su función de brindar seguridad a la población. También destacó problemas como la deuda histórica de 6.6 billones de pesos, el déficit del 6%, el peor crecimiento económico en 35 años, y el grave desabasto de medicinas.
“Este es el saldo innegable de un país en quiebra financiera y moral”, sentenció Murguía, subrayando que la democracia mexicana enfrenta una mayoría artificial no otorgada por la ciudadanía, sino por las autoridades electorales.
La senadora destacó que el PAN coincide en la búsqueda de justicia social, pero señaló que esta debe incluir abrazos para las víctimas, no para los criminales. Insistió en que la ley debe ser respetada y que México debe aspirar a ser un país de clase media, donde nadie sea despojado de lo que ha ganado legítimamente.
Murguía Gutiérrez hizo un llamado a iniciar una nueva etapa sin etiquetas ni descalificaciones, recordando la diversidad del país y pidiendo a Sheinbaum que gobierne para todos, respetando la pluralidad y apoyando por igual a todos los estados y municipios. Asimismo, pidió revalorar la eliminación de los órganos autónomos y oponerse al uso de las fiscalías para amedrentar a quienes piensan distinto.
Finalmente, la senadora extendió la mano a la nueva administración, afirmando que el PAN está dispuesto a colaborar para sacar al país de la crisis actual. “Cuenten con nosotros para todo aquello que sea para el bien de los mexicanos; sí, somos oposición, pero somos una oposición responsable y constructiva”, concluyó.