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Con mensaje de esperanza y compromiso con familias trabajadoras, el gobernador Alejandro Armenta encabezó la reapertura de la Estancia Infantil Número 1 del ISSSTEP. Este espacio, modernizado y seguro, vuelve a recibir a niñas y niños bajo cuidado profesional.
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Con un mensaje de esperanza y compromiso con las familias trabajadoras, el gobernador Alejandro Armenta encabezó la reapertura del Centro Educativo de Cuidado Infantil y Estancia Número 1 del ISSSTEP, tras una rehabilitación integral de sus instalaciones. Este espacio, cerrado durante la pandemia, reabre con áreas completamente modernizadas que garantizan el desarrollo y bienestar de las niñas y los niños bajo el cuidado de personal especializado.
Acompañado por el director general del ISSSTEP, Luis Antonio Godina Herrera, el secretario de Salud, Carlos Alberto Olivier Pacheco, y el secretario general del sindicato, Ángel Vázquez Flores, el mandatario estatal develó la placa de reapertura y recorrió las áreas renovadas: lactantes, maternales, cocina, banco de leche, área séptica, lavandería, salones de clases, psicología, trabajo social, dirección y patio de juegos, todas equipadas con materiales nuevos y señalización de seguridad.
Durante el acto, el gobernador destacó que esta reapertura representa un acto de justicia y humanismo hacia las madres y padres trabajadores del estado, al ofrecerles la tranquilidad de saber que sus hijos están en un entorno digno, moderno y seguro mientras ellos cumplen con su labor al servicio de Puebla. Resaltó que fortalecer al ISSSTEP es una prioridad para mejorar los servicios de salud y asistencia de quienes dedican su vida al servicio público.
El director general del ISSSTEP informó que la estancia actualmente atiende a 43 niñas y niños, con capacidad para 120, y que la remodelación integral permitió convertir antiguas oficinas en espacios educativos funcionales. Subrayó que la obra fue posible gracias a la coordinación entre el gobierno estatal y el instituto, reafirmando el compromiso institucional con la calidad y bienestar de los derechohabientes.
Durante la ceremonia, las trabajadoras de la estancia expresaron su emoción por volver a abrir las puertas del que consideran su segundo hogar. María Elena, con 32 años de servicio, compartió que volver a recibir a los niños representa “una gran alegría” y destacó que “todo está completamente remodelado y pensado para el bienestar de los pequeños”. Por su parte, Leticia González López, auxiliar con 38 años de trayectoria, afirmó que “pensamos que nunca volvería a abrir, pero hoy es un sueño hecho realidad”.
Estas voces reflejan la esperanza, el orgullo y la confianza que las familias y el personal depositan en este espacio que hoy renace para cuidar, educar y fortalecer el futuro de Puebla.
