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El gobernador Alejandro Armenta reafirmó que en la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMT) no se atiende a organizaciones ni grupos de presión, sino a cada persona concesionaria de forma directa, respetuosa y eficiente. Destacó que las concesiones se otorgan individualmente y no a colectivos, por lo que los trámites deben realizarse sin gestores ni intermediarios.
Durante la conferencia de prensa matutina de este lunes, el mandatario estatal exhortó a las y los concesionarios del transporte público a aprovechar los beneficios del proceso de regularización y condonación vigente, reiterando que el objetivo es apoyar a quienes operan dentro del marco legal.
Armenta reconoció el trabajo de la titular de la SMT, Silvia Tanús Osorio, por impulsar el Programa de Modernización del Transporte Público, promoviendo unidades con cero emisiones contaminantes y un servicio digno para la ciudadanía.
Silvia Tanús hizo un llamado a las personas concesionarias y permisionarias para realizar la revista vehicular de forma personal, gratuita y antes del 14 de abril, ya que no habrá prórroga. Anunció que la revista vehicular 2025 ha sido reprogramada hasta nuevo aviso, debido a que ninguna empresa participante en el proceso de contratación cumplió con los requisitos técnicos, administrativos y legales, por lo que se convocará una licitación nacional.
También informó que el Gobierno del Estado ofrece apoyo directo al enganche, equivalente al 20% del valor factura, para adquirir unidades eléctricas o a gas natural, con financiamiento estructurado a través de Nacional Financiera (NAFIN) o banca de primer piso por hasta $2.7 millones de pesos.
El próximo 26 de abril se firmará una carta de entendimiento con NAFIN, el banco alemán KFW y el Gobierno del Estado, para operar un esquema de bonos de chatarrización, que ofrecerá hasta 16.75% del valor de las nuevas unidades como incentivo, condicionado a la destrucción certificada de las unidades antiguas.
Además, se trabaja en un esquema especial de financiamiento para la adquisición de autobuses a gas natural, con pagos integrados al consumo de combustible y plazos de hasta cinco años.
